Comisariada por Esther Alba y Rafael Gil, la muestra se podrá visitar hasta el próximo 24 de enero
El Museo de Bellas Artes Gravina ha presentado esta mañana una nueva exposición que recupera y pone en valor la figura de Joaquín Agrasot a través de un exhaustivo recorrido por casi un centenar de sus obras. La muestra, impulsada por la Diputación de Alicante desde el Área de Cultura y organizada por el Consorcio de Museos de la Comunitat Valenciana (CMCV), ofrece una amplia visión de las distintas disciplinas que trabajó el insigne artista oriolano y se podrá visitar hasta el próximo 24 de enero.
La Diputación ha prestado seis obras para esta propuesta, organizada con motivo del centenario de la muerte del artista el pasado año, cuatro de las cuales forman parte de la exposición permanente del MUBAG ‘El siglo XIX en el MUBAG. De la formación a la plenitud de un artista’. Además, también hay piezas de la Colección Banco Sabadell, del Museo de Bellas Artes Valencia, del Museo Nacional de Cerámica “González Martí” de Valencia, del Museu Nacional d’Art de Catalunya, del Museo de Bellas Artes de Murcia, del Museo de Bellas Artes de Córdoba, del Museo de Bellas Artes de Bilbao, del Museo Carmen Thyssen de Málaga o del Museo Pazo de Tor, entre otros.
Al acto de presentación han asistido la directora del Área de Cultura de la institución provincial, María José Argudo, el director técnico del MUBAG, Jorge Soler, el director del Consorci de Museus de la Generalitat Valenciana, José Luis Pérez Pont, y Rafael Gil, comisario de la muestra junto a Esther Alba.
En su primer acto como responsable del Museo, Soler ha destacado la importancia de la institución en el panorama cultural alicantino y se ha mostrado muy satisfecho con esta nueva propuesta expositiva con piezas que se exhiben por primera vez al público. Por su parte, la directora de Cultura, quien ha hablado en nombre de la vicepresidenta primera y diputada del área, Julia Parra, ha señalado la relevancia de Agrasot a nivel internacional y su papel como uno de los referentes de la pintura moderna en España a principios del siglo XX.
Agrasot estudió en la Escuela de Bellas Artes de San Carlos de Valencia con Francisco Martínez Yago y continúo su formación en Roma, destino principal de los pintores europeos de la época. Allí conoció a Eduardo Rosales, Casado del Alisal y Mariano Fortuny, quien influyó decisivamente en su obra y con quien entabló una profunda amistad. En 1868 inició una nueva etapa italiana gracias a una pensión concedida por la Diputación de Alicante, en la que se interesó por la representación del desnudo, en 1875 regresó a España y, tras pasar una temporada en Alicante, se instaló en Valencia.
Agrasot es una figura capital en la renovación realista de la pintura valenciana, dedicado al costumbrismo regionalista y a las escenas de género, aunque también cultivó el desnudo, los temas orientalistas, el retrato y la pintura religiosa. A principios del siglo XX, el pintor ya era considerado como uno de los artistas más importantes de la pintura moderna de España.