La aeronave ya está operativa y permanecerá en el Parque de San Vicent del Raspeig hasta septiembre, junto a la que opera durante todo el año
El Consorcio Provincial de Bomberos contará este verano con dos helicópteros para la prestación de los servicios de emergencia. Como ya hizo en 2020, el organismo de la Diputación de Alicante incorpora una segunda aeronave con capacidad para seis pasajeros y un piloto que, junto a la que opera durante todo el año, permanecerá en el Parque Central de San Vicent del Raspeig entre los meses de junio y septiembre.
El diputado responsable del área, Javier Sendra, ha explicado que el nuevo medio aéreo, que ya ha entrado en servicio, “se utiliza principalmente en la detección, coordinación, dirección y extinción de incendios forestales, así como en la atención de grandes emergencias”. “La incorporación de este helicóptero permitirá reducir los tiempos de intervención y obtener una visión más precisa del lugar de los hechos y del comportamiento, magnitud y avance del fuego. Gracias a estas tareas de reconocimiento y de la información obtenida se podrán diseñar de forma más precisa y eficaz los planes de extinción”, ha indicado.
El control de quemas agrícolas y la vigilancia de zonas de riesgo, socio-recreativas o de especial valor ecológico son otras de las tareas que asumirá esta aeronave.
El dispositivo especial que el Consorcio Provincial de Bomberos ha diseñado para la temporada estival incluye, además, la activación de los retenes de Santa Pola -Baix Vinalopó- y Pilar de la Horadada -Vega Baja- del 15 de julio al 15 de septiembre. En cada localidad, el servicio estará formado por un cabo, tres bomberos y un vehículo durante 12 horas diarias, entre las 10:00 horas y las 22:00 horas, y atenderá las intervenciones que se produzcan en los citados municipios y en su entorno más cercano.
“Las labores que asumen los retenes son las mismas que realizan los parques. Cuando se recibe una emergencia, se activa tanto el retén como la unidad del parque de bomberos de referencia de la zona” ha señalado Sendra, quien ha añadido que “la salvedad es que como el retén llega antes, es quien evalúa y avisa por si hubiera que desmovilizar la salida en caso de que no fuera necesaria”.
Finalmente, el responsable provincial ha manifestado que ambos servicios “son necesarios durante el verano, ya que es en esta época del año cuando se produce un aumento exponencial de la población y, por tanto, un notable incremento en la densidad de tráfico, dos factores que suponen, en la práctica, un aumento de la isócrona o tiempo de llegada a intervención”.